La experta en finanzas explica cómo se puede conseguir una vivienda subastada y muy barata a través de la Agencia Tributaria.
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Comprar una vivienda en España se ha convertido en un auténtico desafío, especialmente para las familias con rentas medias y para los más jóvenes. El constante encarecimiento de los inmuebles, el aumento de los tipos de interés y el estancamiento de los salarios han elevado el esfuerzo financiero necesario a niveles que muchos españoles no pueden asumir. Como resultado, cada vez son más los que ven cómo el acceso al mercado inmobiliario, ya sea para comprar o incluso para alquilar,se aleja de sus posibilidades.
En este contexto, más allá de las ayudas públicas y programas autonómicos disponibles para facilitar el acceso a la vivienda, ha comenzado a ganar terreno una alternativa que muchos españoles están empezando a contemplar: las subastas de viviendas embargadas por la Agencia Tributaria.
Sobre esta opción ha hablado recientemente en uno de sus vídeos en redes sociales la asesora financiera Eli Defferary. Se trata de propiedades embargadas a contribuyentes y que salen a subasta con precios notablemente inferiores a los del mercado e incluso desde los 7.000 euros, lo que convierte estas subastas en una oportunidad real para quienes sueñan con tener una casa propia y no cuentan con todos los recursos para hacerlo por las vías tradicionales. «Hacienda tiene un sistema de subastas de todo tipo de bienes embargados a los contribuyentes que no han saldado sus cuentas», comienza explicando la experta. «Así que entra al portal de bienes, vas a subastas, en este caso pones inmuebles, comunidad autónoma y échale un vistazo a ver si alguno te convence», comenta Defferary.
@elidefferary Los pisos BARATOS ✅ de Hacienda 👀 ¿Qué te parece?
Participar en una subasta de inmuebles embargados por la Agencia Tributaria es más sencillo de lo que parece. Estas subastas se publican en el Portal de Subastas del BOE, donde se ofrecen propiedades que han sido embargadas a personas con deudas con Hacienda. El objetivo es claro: recuperar parte de lo que se debe al Estado mediante la venta de esos bienes.
Para acceder, el primer paso es entrar al portal oficial de la Agencia Tributaria y dirigirse a la sección de Gestiones. Allí, hay que seleccionar la opción Buscador de bienes en subasta de la Agencia Tributaria. Una vez dentro, se puede filtrar por tipo de bien (como inmuebles, vehículos o muebles) y elegir la provincia en la que se quiere buscar. En cada ficha se incluyen imágenes, el precio de salida, la ubicación, una breve descripción y la fecha límite de la subasta.
Si encuentras una casa, un local, un garaje o un solar que encaje con tus necesidades, puedes participar en la puja de forma totalmente online. Eso sí, antes hay que registrarse con certificado digital, DNI electrónico o Cl@ve PIN y realizar un depósito del 5% del precio del bien como garantía. Este paso es imprescindible para poder pujar, y también tendrás que indicar el número de cuenta desde el que se hace el depósito.
A partir de ahí, el sistema te permite ver en todo momento cuál es la puja más alta y cuánto tiempo queda para hacer nuevas ofertas. En caso de empate, se adjudica al primer usuario que haya hecho la puja. Si resultas ganador, tendrás 15 días para pagar el importe total. Si no lo haces en ese plazo, perderás el depósito realizado.
Riesgos de estas subastas
Aunque estas subastas pueden suponer una gran oportunidad, no están exentas de riesgos. El primero y más importante es que algunas de estas propiedades pueden arrastrar cargas o deudas previas. Si las hay, el comprador deberá asumirlas. También puede ocurrir que la vivienda esté ocupada ilegalmente o que aún haya inquilinos dentro, lo que puede complicar el proceso tras la compra.
Además, estas viviendas no se entregan con garantías ni se revisan ante notario como ocurre en una compraventa tradicional, por lo que conviene estudiar bien cada caso. A veces el inmueble puede estar en mal estado o incluso en ruinas. En esos casos, lo ideal es valorar si compensa derribarlo y levantar una nueva construcción, una estrategia que suelen usar los inversores.
Otra dificultad común es que algunas viviendas estén en régimen de copropiedad. Por ejemplo, herencias o matrimonios en separación de bienes. Si solo se subasta una parte del inmueble, el comprador deberá negociar con los otros propietarios o iniciar un proceso para dividir legalmente la propiedad.
Por eso, aunque estas subastas pueden ser una puerta de entrada a la vivienda para muchos que no pueden pagar precios de mercado, conviene informarse bien, revisar los detalles de cada inmueble y si es necesario, contar con asesoramiento legal antes de pujar.
elespanol – Sociedad
