Isabel Viña, médica: «El problema de los vasitos de arroz es la transferencia de plásticos que se acumulan en el cerebro»

Actualmente es significativamente común realizar comidas rápidas y aparentemente saludables, calentando algunos alimentos al microondas. Pero todo tiene su doble cara.
Más información: El sencillo truco de la abuela que usa la ciencia para eliminar los microplásticos del agua del grifo Actualmente es significativamente común realizar comidas rápidas y aparentemente saludables, calentando algunos alimentos al microondas. Pero todo tiene su doble cara.
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El uso y consumo de ciertos alimentos saludables en formato rápido no ha parado de crecer en los últimos años. Un claro ejemplo serían los vasitos de plástico con arroz de diversos tipos, quinoa, cuscús, avena y un sinfín de variedades de carbohidratos precocinados y listos para su consumo en apenas un minuto. El problema, sin embargo, podría ser precisamente su embalaje basado en plástico fino, como comentaremos hoy.

En este aspecto se ha fijado la Dra. Isabel Viña, conocida divulgadora, y la cual ha dedicado uno de sus reels de Instagram precisamente a este asunto, analizando si realmente son saludables los vasitos de arroz aptos para microondas. Lejos de valorar si su contenido es más o menos saludable, algo que al fin y al cabo dependerá del resto de la dieta y estilo de vida, Viña recalca que su análisis se focalizará precisamente en los plásticos que solemos usar para el consumo humano.

La Dra. Viñas inicia su intervención advirtiendo que el problema real no son los tipos de arroces que suelen contener estos vasitos, explicando que «si bien es cierto que el arroz que contienen los vasitos de arroz es una magnífica fuente de carbohidratos almidonados, tanto o más interesante a nivel metabólico, si además optamos por su versión integral, basmati o vaporizado, el problema fundamentalmente reside en el recipiente en el que suelen ir el arroz, que son envases de plástico».

Viña nos recuerda que cuando calentamos cualquier alimento en un envase de plástico en el microondas se incrementa la transferencia de micro y nanoplásticos desde dicho recipiente hacia el alimento en cuestión. Además, dicha transferencia de plásticos aumenta dependiendo del tiempo que dejemos el alimento calentándose, su temperatura (a mayor temperatura, mayor transferencia) y la cantidad de grasa y ácido que posea el alimento.

Por otro lado, el problema no estaría en un episodio puntual de contacto con nanoplásticos, sino precisamente en el hecho de consumir nanoplásticos de forma continuada y constante, algo que ya está sucediendo hoy en día a gran parte de la población mundial. Hoy en día se sabe, como también nos recuerda la divulgadora, que esta ingesta crónica da lugar a una acumulación de estos nanoplásticos en órganos como el cerebro, el hígado, los riñones o incluso a nivel arterial.

De hecho, en este último caso, la acumulación de nanoplásticos se habría relacionado con una alteración de la estabilidad de las placas de ateroma o placas grasas. En definitiva, dicha acumulación de nanoplásticos aumentaría significativamente el riesgo de sufrir un evento cardio o cerebrovascular, como puede ser un infarto de corazón o un accidente cerebrovascular.

En este aspecto, Viña aconseja que, si vamos a echar mano de un vasito de plástico con arroz de forma habitual, echemos dicho arroz a otro recipiente que no sea de plástico para evitar esta transferencia. Hoy en día existen multitud de recipientes de vidrio, cerámica o silicona adaptados al microondas, e incluso algunas marcas comerciales ya usan vasitos de cristal en lugar de plástico por los mismos motivos que ha explicado la divulgadora en su vídeo.

Viñas clarifica que este consejo sería para aquellos que usan o prefieren consumir este tipo de vasitos de arroz. Usarlos de cuando en cuando, o puntualmente, no acarrearía mayores problemas. El problema real, explica, es su uso constante y bonificado, dado que no solo nos exponemos al plástico de estos vasitos, sino que tanto alimentos como bebidas, incluyendo el agua potable que consumimos, se ha visto en contacto con los mencionados micro y nanoplásticos. En última instancia, estos consejos son útiles para reducir todo lo posible nuestra exposición, dado que evitarla totalmente hoy en día es algo casi imposible.

 elespanol – Salud

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