Rafael Escudero, experto ferroviario: “El precio del cable robado es una miseria, por eso el sabotaje no es descabellado»

El Gobierno ha apuntado a un sabotaje como la principal hipótesis del accidente ferroviario y la Guardia Civil ha abierto una investigación.
Más información: Un juzgado de Toledo abre una investigación sobre el robo de cable que paralizó una treintena de trenes este domingo El Gobierno ha apuntado a un sabotaje como la principal hipótesis del accidente ferroviario y la Guardia Civil ha abierto una investigación.
Más información: Un juzgado de Toledo abre una investigación sobre el robo de cable que paralizó una treintena de trenes este domingo  

La red de ferrocarriles ha vuelto a sufrir un grave problema que ha afectado a miles de pasajeros. El pasado domingo 4 de mayo, final de puente en Madrid e inicio de la Feria de Sevilla, se produjo un robo del cableado de las vías que conectan el servicio de Alta Velocidad entre Madrid y Andalucía.

En este sentido, Rafael Escudero, portavoz del Sindicato Ferroviario Intersindical, ha explicado en el programa Todo es mentira una de las cuestiones que están despertando más interés desde que se produjera el accidente ferroviario. El experto ha apuntado que, según la información que maneja, todo apunta a un sabotaje.

¿En qué se basa? El entrevistado le ha explicado a Risto Mejide que el precio del cable robado en diferentes puntos de las vías en la provincia de Toledo es demasiado bajo para que el objetivo hubiera sido enriquecerse gracias al robo.

«Si miramos en las páginas web de las chatarrerías, el precio del kilo de cobre se está pagando en torno a 6 o 7 euros el kilo. Si a los 50 metros de cable que nosotros calculamos que se ha robado le quitamos el plástico, nos quedaría menos de un kilo por cada cable, una miseria», ha indicado.

Además, aparte de esta circunstancia, ha arrojado más luz al supuesto enganchón del vagón Iryo con la catenaria, que podría deberse también a un cortado de cables.

La catenaria, clave

«Según nuestra información, el maquinista de Iryo vio chispas en la catenaria (que significa que está destensada). Así, creemos que se pudieron cortar los cables de los pesos que tensan la catenaria y que, en consecuencia, esta se descompensase y se quedase todo sin corriente», ha explicado Escudero.

Asimismo, este problema fue el gran causante de los retrasos y de que miles de personas se quedaran atrapadas en los trenes hasta altas horas de la madrugada.

Según el experto, con el robo de cable «los trenes podrían haber seguido circulando en condiciones degradadas (en vez de a 300 kilómetros por hora, a 100 o 120) para que el conductor tuviera tiempo para parar ante la presencia de cualquier obstáculo».

Esta ralentización habría tenido lugar solo durante el tramo del cortado de cables, durante unos 15 minutos. «Como no era muy grave, siguieron saliendo trenes, pero la incidencia con la catenaria fue la que provocó que los trenes se quedaran detenidos por falta de corriente. Los trenes que se quedaron sin corriente en esa vía hacían de tapón al resto de trenes«, ha sentenciado.

 elespanol – Sociedad

Noticias Relacionadas