Toni Soler, guionista de ‘Parenostre’: “Hemos tenido que hacer frente a campañas muy chulas para que la gente no la viera”

Con la misma espontaneidad con la que Tony Banks en 1976 compuso Afterglow, de la banda estadounidense Genesis, el periodista Toni Soler ha repasado su trayectoria vital y profesional en el programa Llapis de Memòria, de SER Catalunya. Una trayectoria que ha estado marcada por el éxito como director del programa de sátira política Polònia. El periodista y productor ha decidido cambiar el rumbo de su ritmo profesional y ha dado el salto al cine como guionista de la Parenostre, una película que muestra como el legado del expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, quedó manchado tras la confesión sobre su delito fiscal. Sin embargo, Soler ha lamentado haber recibido críticas desde todos los sectores. “Es una película que hemos hecho con una campaña muy chula, pero también hemos tenido que hacer frente a campañas muy chulas para que la gente no la viera”, ha reconocido.

Su incursión en el cine no ha resultado ser la esperada. El paso de Parenostre por los cines, estrenada este año y dirigida por Manuel Huerga, ha sido breve, según Soler, porque se han encontrado con problemas por el camino. “La gente más partidaria de Pujol decía que la película iba contra él y contra Cataluña. Y la gente, digamos del PSC a la derecha, decía que blanqueaba su figura”, ha explicado a la presentadora del programa, Gisela Rodríguez.

Esta desilusión contrasta con la percepción que Soler tiene de su paso por Polònia, del que continúa al frente como director. “Nunca más he vuelto a sentirme como un Beatle por la calle”, ha comentado. El programa celebrará el año que viene dos décadas en antena, y Soler ha hablado de cómo ha sabido mantenerse en la cumbre. “Es un pequeño milagro. Creo que hemos hecho bien el trabajo de adaptar el contenido de la televisión lineal en redes sociales y mantener el interés de las nuevas generaciones”.

Ahora, lejos de la presión diaria de la actualidad, el periodista ha destacado la complejidad logística del programa, que suele parodiar hechos actuales el mismo día que suceden. “Es una cadena de trabajo que nos ha costado mucho tiempo organizarla bien, y ahora funciona como un reloj”.

A pesar de seguir muy activo desde su productora Minoria Absoluta, el periodista y productor, natural de Figueres, decidió abandonar la primera línea mediática y centrarse en otros proyectos. “Ahora hago lo que quiero, cuando quiero. Ya no me apetece hacer reír por obligación”, ha reflexionado.

Durante el Llapis de Memòria, Soler ha echado la mirada atrás hacia una carrera frenética con episodios de realización personal como su paso por la radio, donde admite que siempre vivió los momentos más divertidos. “Quiero divertirme, divertirme con Minoria Absoluta, en Rac1, en la radio. Quiero hacerme pipí encima, riendo, y eso solo era allí. Porque la radio es muy loca, y en la televisión debes mantener el control”, ha contado.

Pero por otro lado, el periodista ha identificado etapas de más agitación profesional, como la denuncia que la Fundación de Abogados Cristianos interpuso contra él y su equipo por una sátira sobre la Virgen del Rocío en el programa Està Passant, de TV3, o la complejidad de la cobertura mediática del procés. El paso del tiempo ha relativizado su relación el humor. “Con la edad también valoras que no hace falta reír todo el tiempo. A veces, la simple paz de estar tranquilo y bien con uno mismo es mejor”, ha añadido.