De Vallés a Pedro J. pasando por Calaf: los meses de prácticas de grandes periodistas que forjaron sus éxitos

Todos recuerdan con precisión qué aprendieron en su estreno profesional y cómo les sirvió para vivir del periodismo. El Máster de Periodismo de EL ESPAÑOL se pone a la cabeza al aumentar hasta siete meses las prácticas, remuneradas, en la redacción del diario líder. Todos recuerdan con precisión qué aprendieron en su estreno profesional y cómo les sirvió para vivir del periodismo. El Máster de Periodismo de EL ESPAÑOL se pone a la cabeza al aumentar hasta siete meses las prácticas, remuneradas, en la redacción del diario líder.  

Una pregunta recurrente al hablar de Periodismo es si un buen periodista nace o se hace. La respuesta siempre va acompañada de matices y consideraciones. Sí hay unanimidad entre todos los profesionales sobre la importancia decisiva del periodo de prácticas.

Aquí recogemos la opinión de 12 profesionales, con décadas de ejercicio y de reconocido prestigio.

Como los meses de prácticas son decisivos en el devenir profesional, el Máster de Periodismo Multimedia, promovido por EL ESPAÑOL y por la Universidad Camilo José Cela, aumentará el periodo de estancia en la redacción en su próxima edición, que comienza en octubre.

De los 11 meses de curso, los alumnos invertirán cuatro meses en el Taller de Periodismo del campus y los 7 restantes en la redacción central de EL ESPAÑOL. Este año, además, con otra gran novedad: el laboratorio de Inteligencia Artificial aplicada al periodismo.

Vicente Vallés: “En mi primera conexión entré en directo sin avisarme”

Vicente Vallés.

Vicente Vallés.

Vicente Vallés (Madrid, 1963) es uno de los periodistas más influyentes del momento. Presentador y director del Informativo de la noche de Antena 3, es, además, columnista y autor de un ensayo y dos novelas. Recuerda con pasión sus prácticas a principios de los 80 en la Cadena SER.

“Esos meses de verano fueron determinantes en los inicios de mi carrera profesional, por la cantidad de aptitudes que aprendí de nuestro oficio”.

Se empapó de las enseñanzas de los grandes de la radio –Manuel Antonio Rico, Fermín Bocos, Iñaki Gabilondo o Javier González Ferrari– y tuvo la oportunidad de escribir sus primeras crónicas y sus primeros boletines horarios.

Pero su verdadero bautismo de fuego fue su primera conexión en directo.

“Había una reunión importante en el Ministerio de Exteriores, que se alargó durante muchas horas -relata-. El redactor jefe me envió a sustituir al redactor que la cubría. Me dijo que cuando pasara algo le llamara, que él tomaría las notas y se las pasaría a Fermín Bocos, que dirigía el programa Hora 25«.

«Llamé a la redacción para darle los datos y que él lo contara en directo. Descolgó el teléfono, me dijo que esperara un momento y, de repente, me saludó Fermín en antena. Yo no había preparado una crónica y me vi obligado a improvisar por primera vez. Creo que sobreviví al trance, porque después de aquella experiencia me volvieron a enviar a más sitios».

Pedro J. Ramírez: “Aprendí el valor del dinamismo y de la edición”

El presidente ejecutivo y director de EL ESPAÑOL, Pedro J. Ramírez (Logroño, 1952), aprovechaba las vacaciones para hacer prácticas durante la carrera. Primero, el verano de 1971, en Nueva Rioja, un diario pequeño donde para el recién llegado era posible hacer casi de todo.

Pedro J. Ramírez recitando poemas de Neruda cuando estudiaba en la Universidad de Navarra.

Pedro J. Ramírez recitando poemas de Neruda cuando estudiaba en la Universidad de Navarra.

Gran aficionado al teatro, entre sus recuerdos destaca que tuvo la oportunidad de conocer a Ana Belén, que entonces representaba en Logroño el montaje de Miguel Narros de Un sabor a miel, la obra que lanzó definitivamente la carrera de la actriz.

El siguiente verano, las prácticas las realizó en Madrid, en La Actualidad Española, en un momento de esplendor de las revistas. «De su director, José Luis Cebrián, aprendí mucho -recuerda Ramírez-, por su dinamismo y porque impulsaba mucho el reporterismo. Era, además, un maníaco de la buena edición y de hacer información muy explicativa, muy digerible: trocear los reportajes, utilizar despieces, destacar sumarios… Yo luego siempre he procurado cuidar mucho esos detalles, porque me parece que, efectivamente, son esenciales y que lo importante en un periódico no es sólo el contenido, sino que también cuenta la forma en la que se presenta el contenido».

Rosa María Calaf: “Fue un tiempo decisivo para mi futuro como corresponsal”

Rosa María Calaf (Barcelona, 1945) es una de las pioneras y grandes reporteras internacionales. Acaba de recibir el último premio Maga de Magas de este periódico. Recuerda que en su época, a principios de los sesenta, “no había prácticas, sino que uno se enteraba de cuando necesitaban a alguien en un medio y se presentaba”.

Ella, con una formación privilegiada en la Escuela de Periodismo y en Derecho -su vocación entonces era ser diplomática-, supo que buscaban una mujer en RNE en Barcelona y allí se plantó.

Rosa María Calaf, en sus comienzos, reporteando en la calle para TVE.

Rosa María Calaf, en sus comienzos, reporteando en la calle para TVE.

La acogieron “con los brazos abiertos” y pronto empezó a hacer un programa en directo y a convertirse en una experta en el uso de las primeras unidades móviles, entonces recién llegadas.

A los pocos meses, ya compaginaba la radio con la televisión, donde tampoco había apenas mujeres.

“Fue un tiempo decisivo -explica- para mi futuro profesional como corresponsal y enviada especial. Cuando llegué a Madrid en 1974, ya había hecho de todo, así que pronto me enviaron a hacer coberturas por el exterior”.

Lo demás ya es historia del periodismo. En total, Calaf ha trabajado en 184 países (sólo le quedan once).

Juan Cruz: “Un maestro acendró mi vocación”

Juan Cruz.

Juan Cruz.

Más o menos al mismo tiempo, en 1961, Juan Cruz (Santa Cruz de Tenerife, 1948), fundador de El País y uno de los periodistas culturales más prestigiosos, publicaba su primera crónica con sólo 13 años en El Día de Tenerife. “Desde entonces, ya no paré”, dice.

A los 17, se incorporó a La Tarde, también en Tenerife. Y allí ocurrió algo decisivo para su carrera.

 “Un periodista fantástico, el subdirector Alfonso García-Ramos, fue mi maestro y acendró mi vocación. El doctor Barnard había hecho el primer trasplante de corazón y nadie sabía nada sobre el asunto, así que me encargó el tema. Cuando a los pocos días el receptor del trasplante falleció y vi mi firma bajo el enorme titular de portada -“Muere Louis Washkansky”-, me sentí como si estuviera en el New York Times”.

Miguel Ángel Mellado: “Descubrí que siempre hay que ir a los sitios y ser precisos”

Miguel Ángel Mellado (Campo de Criptana, 1956), director del Máster de Periodismo de EL ESPAÑOL, ex director de Información de este diario y creador de numerosas revistas y suplementos, afirma sin ambages que hizo las prácticas el mejor año posible para comenzar: en 1977, con el estreno de la Democracia en España.

«Soy un periodista marcado por la Transición. En aquellos meses trepidantes de junio y julio se me quedaron grabadas, al menos, tres enseñanzas que me han acompañado siempre y que he intentado aplicar y transmitir a los jóvenes periodistas. Una: hay que ir a los sitios; dos: la precisión y el dato son fundamentales en el periodismo; tres: si no hay imagen, no hay historia”.

Miguel Ángel Mellado, en 1979, en la redacción de Hoy de Extremadura. Foto:,Roque Alonso.

Miguel Ángel Mellado, en 1979, en la redacción de Hoy de Extremadura. Foto:,Roque Alonso.

Se refiere, en el primer caso, a lo que vio y sintió la noche electoral del 15 de junio de 1977, en la sede del PCE, en pleno barrio de Salamanca, con Santiago Carrillo en la puerta actuando de guardaespaldas con los asustados periodistas al salir de allí de madrugada. Se temía un atentado de la extrema derecha.

 Un mes después, en julio, como inexperto encargado de las páginas de hueco del diario YA, aprendió el valor del dato y de la foto. «Nunca pensé que pudiera ser tan difícil hacer 30 pies de foto en el cuadernillo central del periódico, con datos precisos en temas tan diferentes como la subida de la gasolina o la cogida mortal de un chico en los sanfermines el 8 de julio del 77. Estar seguro de si José Joaquín, así se llamaba la víctima, tenía 17 años y no 20 me costó sudores, pero la precisión hasta en lo pequeño siempre compensa el esfuerzo».

Lara Siscar: “Aprendí una visión global del oficio”

Lara Siscar (Gandía, 1977), presentadora del Telediario de fin de semana en TVE y escritora, tuvo la suerte de ser contratada ya en tercero de carrera, no como redactora, sino como ayudante de producción en RTVE en Sant Cugat, en Barcelona, donde permaneció tres años.

Lara Siscar.

Lara Siscar.

“Planificaba con antelación todas las necesidades que el equipo al completo, redactores, realizadores, cámaras, invitados, podían necesitar para que un reportaje o cobertura fuese eficiente y exitosa -explica la periodista-. Todos mis compañeros me hacían saber de qué modo se facilitaba su trabajo y qué obstáculos lo dificultaban. Aprendí por tanto a tener una visión global del ejercicio del periodismo televisivo.”

“Cuando llegó el momento, en el año 2000, de ser yo quien redactaba una información, pedía a los cámaras los recursos visuales para cubrirla, me ponía yo misma delante de una cámara, montaba piezas o reportajes, o gestionaba los contactos y permisos necesarios para evitar impedimentos al trabajo de todos. Gracias a aquellos principios, ya tenía recursos suficientes para llevar a cabo con rapidez y eficiencia mi trabajo”.

María Peral: “Aprendí una barbaridad, insuperable”

Un caso muy diferente es el de María Peral (Ciudad Real, 1962), adjunta al director de EL ESPAÑOL y responsable de tribunales. Los veranos de la carrera los pasó haciendo prácticas en el diario Lanza de Ciudad Real, tanto por su interés profesional como por necesidades económicas familiares.

“Aprendí una barbaridad y a la altura de tercero ya me hicieron un contratito. Aquellos inicios fueron providenciales, porque el director, José María Zuloaga, me llevó a Madrid cuando fue contratado por ABC en 1988. Para mí, las prácticas son un momento muy emocionante de tu carrera, en el que lo miras todo con ojos de descubrimiento y con curiosidad infinita. Es un periodo insuperable”.

José Ángel Abad: “Sabía que si aprovechaba las prácticas me quedaba”

José Ángel Abad (Gijón, 1971), corresponsal de Antena 3 en Nueva York, ya había sido freelance en Bosnia cuando en 1993 realizó prácticas en la cadena.

“Para un corresponsal -cuenta- la herencia de la redacción es fundamental, porque luego vas a estar muy solo. Es muy importante seguir siendo ‘uno de los nuestros’, y para eso es esencial echar raíces. Cuando tuve prácticas, me di cuenta de lo necesaria que era la vida en la redacción, esos momentos en que uno puede compartir experiencias, aprender por ósmosis de los compañeros.”

“Aprovechar el tiempo de las prácticas es muy importante. Yo estaba feliz de pasar las máximas horas posibles en la redacción. Exprimí el tiempo al 150 por ciento. Fue una oportunidad maravillosa, como un amor correspondido, un momento para entregarse. Sabía que si aprovechaba las prácticas me iba a quedar. Y así fue durante los siguientes 32 años”.

Lourdes Garzón: “Una novata firmando portadas”

Lourdes Garzón.

Lourdes Garzón.

Lourdes Garzón (Ávila, 1967), productora ejecutiva de Globomedia y ex directora de Vanity Fair, dio sus primeros pasos profesionales en El Mundo a principios de los noventa.

“Compartí páginas con periodistas que dejaban a una novata firmar las portadas de los domingos con una confianza que ahora me parecería aterradora. Y aprendí, claro, aprendí casi todo lo que todavía sé ahora. Ya puedes tener la mejor historia del mundo que si no la lanzas con un buen titular, si no despiertas el interés, si no aseguras la relevancia, solo servirá para perder una buena oportunidad”.

“Aprendí que los reportajes hay que escribirlos como si fueran el primero y el último. Aquello que preguntaba Miguel Ángel Mellado cuando se lo entregabas: ‘¿Pero es la versión definitiva?’. Aprendí que las entrevistas se preparan con la pregunta y la repregunta. Que trabajamos, siempre, para nuestros lectores. Lo demás es ego y, en el peor de los casos, conformismo”.

Daniel Ramírez: “Las prácticas son la mayor ventaja competitiva respecto a tu generación”

Daniel Ramírez, junto a Vargas Llosa.

Daniel Ramírez, junto a Vargas Llosa.

Mucho más reciente es el caso de Daniel Ramírez (Pamplona, 1992), redactor jefe de EL ESPAÑOL, que hizo prácticas en los veranos de 2010 a 2014 -y a veces, durante el curso- en Onda Cero (Pamplona y Madrid) y en ABC.

 “Las prácticas -sostiene- han sido fundamentales y casi las consideraría a la altura de la carrera, porque la carrera te forma y las prácticas te definen y te colocan en la realidad. Es un privilegio acceder a una gran redacción y descubrir ese momento único en el que experimentas la pérdida del miedo a la vez que adquieres los conocimientos prácticos. Hay algunas dinámicas periodísticas que sólo se pueden aprender ejerciendo el oficio. Las prácticas, en fin, son la mayor ventaja competitiva que puedes tener con respecto a la gente de tu generación”

Leandro Pérez: “Aprendí que no hay 2 jefes iguales”

En los noventa hizo prácticas Leandro Pérez Miguel (Burgos 1972), hoy director de la web cultural Zenda y novelista. Primero en Diario de Burgos, donde llegó a firmar un tema de portada de trascendencia mundial: Unos restos hallados en Atapuerca databan en 500.000 años la presencia de los primeros seres humanos en Europa.

Leandro Pérez Miguel.

Leandro Pérez Miguel.

Al finalizar la carrera, consiguió hacer prácticas en la sección de Cultura de El Mundo. “Aprendí y aprendí y aprendí que no hay dos jefes iguales, que todos aportan, y quiero pensar que también seguí llevando la teoría a la práctica porque tuve el lujo de trabajar en la misma sección que grandes periodistas».

«Luego llegó Internet y cambiaron de repente muchas, demasiadas cosas. Gané fama de que se me daban bien los ordenadores y los entornos digitales, así que cuando la redacción de Internet fue creciendo, me dieron la oportunidad de montar elmundolibro.com, allá por el año 2000, un sitio donde la literatura e Internet convivían en buena armonía, como hoy en Zenda”.

Juan Carlos Laviana: “Los Alfaques, mi bautismo profesional dramático”

Juan Carlos Laviana.

Juan Carlos Laviana.

Y para cerrar este recorrido por las oportunidades que ofrecen las prácticas, quien esto escribe, Juan Carlos Laviana (El Entrego, Asturias, 1958), jamás olvidará aquel 11 de julio de 1978 cuando realizaba prácticas en la sección de sucesos de Diario de Barcelona.

Con menos de 20 años y tras apenas diez días en la redacción, fue enviado al camping de Los Alfaques en Tarragona, donde la explosión de un camión cisterna causó la muerte de 215 personas y más de 300 heridos graves.

“Fue un bautismo profesional dramático y una primera firma en portada ensombrecida por la magnitud de la tragedia. Pero no hay que asustarse, hay formas menos abruptas de aprender durante las prácticas, como pude comprobar los dos años siguientes en las redacciones de la agencia Europa Press y de Diario 16, que determinaron mi futuro profesional”.

 elespanol – Sociedad

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