El artista Dulzaro reprende a PP y Vox por sus políticas LGTBI en Valladolid

El artista Dulzaro ha aprovechado su designación para leer un manifiesto por el Orgullo en Valladolid para reprender al Ayuntamiento de Valladolid, dirigido por el PP apoyado por Vox, por sus políticas LGTBI. Desde que esa alianza llegó al mando municipal no se ha vuelto a colocar la bandera arcoíris en el balcón consistorial, como sí se hiciera cuando regían el PSOE y Valladolid Toma La Palabra, mientras Vox ha intentado denostar eventos o celebraciones del colectivo. “A estos partidos no se les debe dar voz, no se negocia con el odio. La extrema derecha que gobierna en este Ayuntamiento parece obsesionada con la faceta festiva y desinhibida del colectivo LGTBQ+, como si el placer y la celebración fueran un crimen”, ha criticado Dulzaro, vallisoletano de nombre Alberto Domínguez Buitrón y de 30 años.

El músico especializado en mezclar folclore con techno y enfoques modernos ha aprovechado el altavoz de la cita para reivindicar al mundo LGTBI durante la lectura de un manifiesto durante la celebración institucional del Orgullo, mucho menos destacada que con las izquierdas en el poder. “Colgar la bandera LGTBQ+ visibiliza y apoya al colectivo, sensibiliza a la sociedad contra la discriminación, reconoce la lucha por nuestros derechos, crea un entorno más seguro e inclusivo y reafirma el compromiso institucional con la igualdad”, ha afirmado Dulzaro, molesto con que desde que el tándem político de derechas llegara al Ayuntamiento el edificio de la plaza Mayor ya no luzca los colores arcoíris.

El alcalde, Jesús Julio Carnero (PP), sí colgaba esa enseña simbólica cuando era presidente de la Diputación de Valladolid, si bien en cuanto pactó con Vox no lo hizo en el Ayuntamiento. Allí se ha pronunciado Dulzaro, molesto con que el PP se alíe con esas fuerzas políticas: “No se negocia con el odio”.

El pucelano ha lamentado que en los últimos meses su ciudad ha vivido varios episodios de odio contra personas y parejas homosexuales y ha instado a que en Valladolid “quepamos todas, todos y todes”. El artista, que en sus conciertos luce una camiseta donde presume de “Castellano y maricón” como vía de visibilización y concienciación, ha leído un manifiesto titulado “Existir con Orgullo es vencer cada día” y en él ha destacado la importancia de darle voz a esos colectivos en dificultades: “Nunca he pretendido ser activista, pero sé que ocupar ciertos espacios, ser visible, vivir con libertad, es una forma de activismo. Es algo que defiendo con orgullo”.

Parte del discurso ha referido a la teniente de alcalde, Irene Carvajal, como representante de las ideas de Vox, a pesar de que nadie del partido se ha presentado al acto. La también concejala de Cultura criticó hace unos días la celebración del festival LGTBI ‘Zorilla’s Fest’, donde varios cantantes y grupos del colectivo actuaron en el centro de la ciudad. Carvajal, ante las críticas en redes sociales de cuentas reaccionarias por la celebración de tal evento en una ciudad donde Vox ostenta parte del poder, destacó que su partido votó en contra de la cita, aceptada por los votos del PP. A su vez, la cuenta oficial de la formación en Valladolid colgó fotos de la suciedad posterior a los conciertos, algo que nunca hace tras encuentros de cientos o miles de personas, como la reciente fiesta de San Juan, donde también se acumularon toneladas de porquería.

La concejala de Cultura también aseguró que ese festival fomenta la promiscuidad, lo cual ha afeado Dulzaro: “No, Irene Carvajal, por mucho que un festival se llame ‘Zorrilla’s Fest’, eso no promueve la promiscuidad. Celebrar nuestra diversidad y disfrutar de la música no es ningún delito ni un ataque a la moral, es una celebración de nuestros derechos conseguidos”. Para él, los comentarios de la alto cargo suponen una “falta de respeto profundamente grande” y “demuestra que a la extrema derecha aún les incomoda nuestra existencia y que vivamos con libertad. Nos queda mucho camino por recorrer”.