El antiguo edificio de Telefónica ubicado en la Avenida Roma, en el Eixample barcelonés, ha reabierto sus puertas tras pasar 13 años cerrado. Más de la mitad de las 14 plantas del edificio, que estará destinado a albergar empresas de los sectores de la comunicación, finanzas o tecnología, estarán ocupadas por la farmacéutica AstraZeneca, mientras que en la planta baja funcionará un gimnasio de la cadena Planet Fitness y restaurantes como Honest Greens o Casa Carmen.
El renovado edificio Estel albergará las oficinas de AstraZeneca, un gimnasio de la cadena Planet Fitness, varios restaurantes y 4.000 trabajadores
El antiguo edificio de Telefónica ubicado en la Avenida Roma, en el Eixample barcelonés, ha reabierto sus puertas tras pasar 13 años cerrado. Más de la mitad de las 14 plantas del edificio, que estará destinado a albergar empresas de los sectores de la comunicación, finanzas o tecnología, estarán ocupadas por la farmacéutica AstraZeneca, mientras que en la planta baja funcionará un gimnasio de la cadena Planet Fitness y restaurantes como Honest Greens o Casa Carmen.
La remodelación del inmueble, obra del arquitecto Albert Blanch, ha sido realizada por las firmas internacionales Bain Capital y Freo Group y entre las características más significativas de la obra destacan la capacidad de albergar 4.000 trabajadores, una superficie de 50.000 metros cuadrados, una fachada completamente renovada y espacios comunes como gimnasios, salas de reuniones, un rooftop, una cantina o un nuevo auditorio ubicado en el mismo lugar que en la antigua edificación.
La multinacional farmacéutica británica trasladará al edificio Estel 2.000 nuevos empleados —de los cuales 1.300 ya han sido contratados y se encuentran repartidos en otras sedes de Barcelona— como parte del proyecto de innovación de la compañía que ha representado una inversión de 1.300 millones de euros en España. El nuevo hub global de la farmacéutica estará dedicado a la innovación y a la aceleración de procesos para encontrar tratamientos contra enfermedades cardiovasculares, renales, de metabolismo o el desarrollo de vacunas e inmunoterapia. La farmacéutica ocupará ocho plantas del edificio, concretamente desde la sexta hasta la decimotercera. Cada una de las plantas tiene una superficie de 2.500 metros cuadrados.
La cadena norteamericana de gimnasios de bajo coste Planet Fitness ocupará aproximadamente 1.700 metros cuadrados distribuidos en las plantas -1, 0 y 1, mientras que en el resto de los locales de planta baja se ubicarán, por ahora, dos negocios de restauración: Casa Carmen y Honest Greens. Desde la empresa constructora han asegurado que esperan tener todo el edificio ocupado a finales de año, aunque actualmente el edificio ya se encuentra listo para acoger a los nuevos inquilinos. La empresa constructora ha adelantado que actualmente se encuentra en negociaciones con firmas del sector de la tecnología, transporte o finanzas para arrendar las oficinas disponibles.
Por dentro, el vestíbulo cuenta con un espacio amplio para recibir a los trabajadores y escaleras en forma de espiral que conectan con el primer subsuelo en donde se concentran las áreas comunes pensadas para favorecer la interacción de los usuarios. El edificio tendrá una zona en el que los trabajadores podrán dejar sus patinetes o bicicletas para luego conectarse con los ascensores o las escaleras que llevan a la cantina, el auditorio, los gimnasios o las salas de reuniones. Los diseñadores han optado por una decoración sobria en la que resaltan los acabados en color madera o las columnas de hormigón.
La construcción incluye cinco subsuelos de parking y un corredor central que se encuentra aislado del ruido exterior, una especie de “oasis” en medio del edificio que podría servir para comer o descansar según el uso que le quieran dar los inquilinos. Uno de los puntos fuertes del patio interno es la capacidad de eliminar los ruidos provenientes de la calle o de mantener las temperaturas bajas durante los meses de más calor.
El concurso de arquitectura para la remodelación privilegió aspectos como la funcionalidad, la sostenibilidad, el respeto por el entorno o la fachada: “El reto era hacer un edificio emblemático, que respete el entorno y que dé cobertura al barrio, queríamos de alguna forma que el edificio diese una buena imagen, creo que lo hemos conseguido”, ha expresado Daniel Mayans, director de Freo en España.
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